El fin de las bolsas de plástico

La Mar y sobre todo su costa, suelen estar atestadas de bolsas de plástico desechables.

Cuando éstas entran en contacto con el agua de mar, sus habitantes pueden confundirlas con alimento o quedar atrapados en una de ellas y morir. Además tardan una media de 400 años en descomponerse y mientras lo hacen, generan un montón de partículas contaminantes que causan a su vez mayores daños al medio ambiente.

Aunque muchas acaban en la Mar, la gran mayoría lo hacen en vertederos, permaneciendo en estos montones de décadas. Después de consultar varias fuentes y hacer una media aproximada de los datos, sabemos que cada vasco consume al año una media de 200 bolsas desechables, generando a nivel estatal alrededor de 12.500 millones de bolsas, las cuales apenas se usan una sola vez. Esto genera miles y miles de toneladas de residuos no biodegradables, eso, sin mencionar los cientos de toneladas de CO2 que se vierten a la atmósfera en la producción de las mismas.

Parece que por fin, y sólo ante la pesadilla que supone este tipo de desechos para las administraciones públicas, se ha reducido bastante su uso en los últimos dos años y que para el año 2018, la bolsa de polietileno desechable será suprimida en el estado pasando por fin a la historia.

Para reducir o rechazar su consumo, tenemos montones de alternativas reutilizables, como las bolsas biodegradables de plástico de maíz, soja, patata, o las hechas con fibras naturales como algodón o bambú. Al principio te costará llevar una siempre encima, pero estamos seguros de que te animará pensar en el residuo que dejarás de generar cada vez que rechaces una. También está el reciclaje de las mismas, lo cual también genera residuos, por ello, antes de reciclar, siempre será mejor rechazar o usar materiales reutilizables.