REPARACION de fortuna (Patín de la mayor)

En un velero, como en cualquier sitio en el que haya mecanismos en movimiento, estos están sometidos a un desgaste y tienen un tiempo de vida útil estimada. Se supone que estos elementos deben de durar una cantidad de horas pero a veces el desgaste es más rápido y corrosivo que otras. Puede que también haya habido un sobre esfuerzo y por eso una pieza ha durado menos de lo que debía.

Es obvio que haya piezas de repuesto en el barco, pero claro, no todas y por qué será que siempre hace falta la que no hay.

Este es el caso en el que diríamos entre nosotros, “Hay que hacer una de McGyver” y se ponen dos, tres o cuatro mentes a pensar. Aportando un poco cada una de ellas y con el material disponible a bordo, se ingenia algo para que esa pieza haga una función igual a la que hacia antes de romperse. Es lo que se conoce como una “reparación de fortuna”, que a veces aguanta lo que tiene que aguantar y otras veces no. Pero que normalmente te puede sacar de un apuro.

En este ejemplo se torció un patín de la vela mayor, mediante el cual el gratil de la vela se desliza y a su vez se aferra al carril del palo. Con este patín roto y con su eje fuera de sitio, una parte del gratil quedaba suelta. No hubo más que sacar el eje por completo y utilizando los agujeros del mismo patín y de la vela hacer una especie de zurcido para unirlos y poner a trabajar la vela de nuevo.